Las mujeres, en el Perú, han sufrido de maltrato a lo largo de los años hasta llegar a ser parte del mundo laboral. A pesar del largo camino recorrido por ellas, oímos cada vez más frases sexistas como “Trabaja como hombre”. Esto muestra una clara cultura machista en la sociedad, lo que genera que el porcentaje de desigualdad de género sea de 42%. Se cree que un hombre trabajará mejor que una mujer, solo sobre la base de su género. Debido a ello, en el mercado laboral, se genera desigualdad salarial, empleo injustificado de trabajadores hombres, agresión física y verbal, entre otras cosas. Pero, aparte del machismo, el Estado también es uno de los factores que incrementan esta desigualdad. Todo ello ocasiona daños físicos, psicológicos y económicos en las víctimas, y esto es algo que debe cambiar.

Después de nuestra larga investigación sobre el tema del maltrato laboral, hemos concluido que el índice de desigualdad es más alto del esperado. A pesar de que, actualmente, es normal ver mujeres liderando empresas, mucha gente piensa que ellas deben dedicarse a sus hogares, mientras que los hombres, a conseguir dinero. Esta forma de pensar, en pleno siglo XXI, nos parece incorrecta y hasta retrógrada. Pensamos que no puede ser posible que se sigan haciendo estas diferencias entre ambos sexos, ya que las mujeres hemos demostrado ser capaces de hacer cualquier cosa que un hombre pueda. Es triste que incluso las mismas mujeres piensen de esta forma, pero es aún más triste que no se haga nada para cambiarlo. Como mencionamos antes, el Estado tiene mucho que ver, ya que solo destina el 0.01% del presupuesto en el Ministerio de la mujer y poblaciones vulnerables. Además, solo el 3.8% de los denunciados por acoso sexual están presos. Como se muestra, esa es una cifra inaceptable. En este sentido, el temor de las mujeres es seguir siendo maltratadas en su trabajo. Esto ocurre debido a que el estado no es capaz de hacer cumplir las leyes que promulga. Por otro lado, las leyes no amparan a las trabajadoras del hogar remuneradas. ¿Qué está esperando el Estado para empezar a actuar? ¿Que muera alguna mujer “importante”? No podemos quedarnos callados mientras que se siguen maltratando, cada día, más mujeres. El índice de desigualdad puede y debe reducirse, pero todo depende de nosotros.

Por esas razones se creó este boletín. Buscamos que las personas tomen consciencia sobre la cultura de la sociedad, buscamos mejorar el pensamiento de las personas, buscamos que cada día haya menos desigualdad. Nos interesa que la gente se informe de este problema, que parece no ser muy relevante en la actualidad. Queremos lograr que el Estado nos escuche y que entienda que este no es un problema que deba pasarse por alto. Queremos una sociedad más justa, y que la gente deje de trabajar “como hombre” para empezar a trabajar también como mujer.